El jugador catalán vuelve a la que fue su casa, en los inicios de su carrera

El jugador, formado en la cantera blanquiazul, iba a visitar por primera vez La Rosaleda con público. El año pasado ya jugo en Martiricos, pero sin gente en la grada. El partido, que será la vuelta del aforo completo en La Rosaleda, servirá como vara de medir, para ver que recuerdo guarda la afición acerca de él.

El jugador convivió en la cantera con Javi Jiménez, Luis Muñoz y varios jugadores de la actual plantilla. Su periplo fue largo, llegó a debutar con 17 años en el filial, e hizo lo propio en el primer equipo a los 21. Un total de 24 partidos disputó con la camiseta blanquiazul, no llegando a anotar ningún gol.

Su progreso por el club, se vio marcada por la cesión al Tenerife. En su etapa en las islas, Disputó 16 partidos y anotó 4 goles, que le sirvieron para asentarse en el primer equipo malaguista. Siendo jugador del primer equipo, vivió in-situ el play-off frente al Depor, pero no disputó ningún minuto.

El problema vino, cuando se le debía hacer contrato profesional. En el mercado veraniego de 2019, el Málaga ficha a un jugador de renombre -Shinji Okazaki- pero los dirigentes del club, obviaron el hecho de que debían integrar en el primer equipo a Mula e Iván Rodríguez. El extremo, acabó quedándose sin ficha y no pudo disputar partidos con el Málaga. En invierno, se marchó cedido al Alcorcón.

Tras volver de Alcorcón, y para volver a sufrir lo mismo, en un club sumergido en un E.R.E, se marcha al Fuenlabrada, dejando una cantidad de dinero en las arcas del club.

Desde entonces, Mula se ha enfrentado dos veces al Málaga. Perdió 1 a 2 en el Fernando Torres, y ganó 0 a 1 en su visita a una Rosaleda vacía.